martes, 24 de agosto de 2010

El IPHES exporta su experiencia en restauración a Chile



Lucía López-Polín participa en un curso como docente basándose en los trabajos realizados en yacimientos como Atapuerca o el Abric Romaní

Cómo la restauración sirve para recuperar información y preparar el material para que pueda ser analizado será el objetivo principal de las clases que Lucía López-Polín imparte en el curso Conservación y restauración del patrimonio paleontológico y prehistórico, que del 23 al 27 de agosto se desarrolla en el Centro de Santiago de Chile, organizado por el IPCE (Instituto de Patrimonio Histórico de España) Área de Intervenciones en Bienes Muebles, Servicio de Conservación y Restauración de Obras de Arte, Patrimonio Arqueológico y Etnográfico (CROAPAE) y el Centro Cultural de España en Santiago de Chile, dentro del programa ACERCA, de la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo).

La restauradora Lucía López Polín en los laboratorios del IPHES - Jordi Mestre / IPHES

Lucía López-Polín impartirá los temas centrales del curso: desde la metodología de conservación y restauración, la limpieza y consolidación de restos óseos, pasando por los tratamientos in situ y los métodos de embalaje y traslado, hasta las técnicas de moldeo y de obtención de reproducciones, tanto las tradicionales como las de obtención de réplicas a partir de digitalización.

“Cuento todo esto –explica la restauradora del IPHES- basándome en los ejemplos de los yacimientos plio-pleistocenos en los que trabajamos desde este instituto, como Atapuerca, Abric Romaní, Camp dels Ninots, Tossal de la Font o Cansaladeta, entre otros”.

“La experiencia en estos yacimientos –añade- permite tener claro cómo abordar el tratamiento en los propios yacimientos, y cómo preparar el material para la investigación. Es decir, nos quedamos en la primera fase del tratamiento de materiales arqueopaleontológicos, lejos del objetivo de prepararlo, por ejemplo, para su exposición, lo cual suele requerir tratamientos en los que, por ejemplo, se acentúe más el nivel de limpieza, se reconstruyan más los fósiles para que el público los entienda, etc”.

Al curso asisten conservadores, restauradores, docentes, arqueólogos, arquitectos, gestores de patrimonio especializados o relacionados con la conservación de yacimientos y materiales paleontológicos y/o arqueológicos, y pertenecientes a administraciones e instituciones académicas relacionadas con la conservación del Patrimonio Arqueológico en Latinoamérica.